El ciclismo de montaña atrapa, eso es un hecho, nos ofrece un reto físico y mental que nos motiva a superar miedos y retos. Te dejamos estos consejos básicos que te van a servir en cualquier rodada de MTB.
1. Lleva las refacciones básicas
En el caso del ciclismo de montaña, es común internarse en lo profundo del bosque o la montaña, en donde es difícil conseguir ayuda en caso de un imprevisto.
Por eso es obligatorio, llevar como mínimo las herramientas básicas así como una cámara de repuesto para la llanta de tu bicicleta.
Créeme que quedarte varado en medio de la nada pone en riesgo a tu seguridad y la de todo el grupo con el que sales a rodar.
2. Hidrátate bien y duerme bien la noche anterior
Tu rendimiento se verá reflejado por las horas de descanso que hayas tenido. Seguramente alguna vez te ha pasado que aunque tengas condición, se te dificulta aguantar el paso en alguna rodada. Incluso en la bajada estar desvelado puede influir en tu espontaneidad para improvisar.
Durante el día anterior a tu rodada, mantente hidratado y si puedes que sea al menos una botella de agua isotónica. De esta manera, tus músculos estarán hidratados y tendrás un desempeño adecuado.
3. No salgas a rodar solo
4. Viste adecuadamente
Salir a rodar con ropa poco adecuada puede echarte a perder toda la aventura. Es importante que la ropa que uses sea de secado fácil, ya que el pedalear en subidas te hará sudar.
Los shorts con licra que integra chamois son esenciales. Pasarás sentados sobre el sillín aproximadamente entre 3 y 4 hrs. Si eres mujer, no uses pad de hombre y viceversa, ya que cada pad está diseñado para la fisionomía de cada sexo.
Sé que los jeans tienen la fama de ser todo terreno, el problema se presenta cuando nuestra rodada incluye ríos y lluvia. La mezclilla absorbe el agua y se hace pesada la prenda. Es por esto que no es recomendable, además como vas a estar pedaleando puede rozarte en algunas partes del cuerpo; además, no libera el calor.
5. No te canses antes de tiempo
No quemes toda tu energía al inicio, agarra tu paso. Si quemas toda la energía a media rodada, te sentirás muy fatigado antes de acabar la subida. Para el descenso, ya sin nada de energía, pondrás en riesgo tus habilidades sobre la bici.
Si conoces la ruta, podrás medir tu energía de manera más eficiente. Podrás determinar cuales son las partes que requieren mayor esfuerzo y donde puedes relajarte un poco.