Santiago Roel, Semáforo Delictivo
Muchos amigos siguen enfrascados en el tema electoral, que si votar, que si anular.
1. Los anuladores se manifiestan en contra de todos los partidos. Y quizá tienen razón, pero conforme a la ley electoral actual, el anular el voto no tiene ningún efecto; no se anula la elección, ni siquiera la casilla.
2. Otros promueven algún partido o candidato de su preferencia.
3. Otros piensan que hay que ir a votar por defender ese derecho aunque no haya muy buenos candidatos o partidos.
En fin, nosotros respetamos la preferencia electoral de cada quien. Es un derecho que pueden ejercer -o no ejercer- con plena libertad.
Lo importante para nosotros va mucho más allá: A los gobiernos y partidos hay que presionarlos día a día con rendición de cuentas.
Esa es la intención del Semáforo, dotar de poder a los ciudadanos con información relevante para que puedan impactar favorablemente en su entorno.
No debemos confundir democracia o procesos electorales con buen gobierno. El buen gobierno se logra con buena ciudadanía -armada de datos, razones y redes sociales- que presionan constantemente, día a día, mes a mes.
Ese es el cambio de sistema que requiere México y afortunadamente está en nuestras manos. Lleva tiempo, sí, pero menos de lo que creemos. Además, no hay de otra.
No esperen buenos gobernantes con cualidades sobrenaturales. Por el contrario, hay que sospechar de todos.
Mejor construyamos un sistema a prueba de corruptos e ineptos y verán que empezarán a surgir mejores liderazgos en el gobierno.
La diferencia entre los gobiernos avanzados y los gobiernos ineficaces y corruptos está en sus sistemas, no en las personas.
Si nosotros lideramos, los gobernantes nos seguirán.
Esa es la lección de las naciones avanzadas.