Vestidos de novia para mujeres curvys: los mejores estilismos para cada novia
Aunque no hay reglas ni protocolos, sí hay algunas sugerencias que podrás tomar al momento de elegir tu vestido de novia plus size.
¡Celebra tus curvas también en el gran día!
Clásicos
Los trajes helénicos se confeccionan con el corte imperio, que se caracteriza por su cintura alta y corte justo debajo del busto, desde donde cae fluidamente la falda.
Por ello es que son muy demandados en tallas grandes cuando el objetivo es disimular el vientre y las caderas. Pero además son favorecedores vestidos de novia para gorditas y bajitas, ya que habitualmente se elaboran en telas plisadas, que aportan unos centímetros extra. La bambula, la gasa y el georgette son las telas más usadas para diseños helénicos.
Bohemios
Los modelos de inspiración boho siguen marcando tendencia y por cierto que son una estupenda opción para novias curvy.
Ya que son vestidos holgados, habitualmente de línea A o corte recto, moldean el cuerpo sin ceñir, centrando la atención en los detalles. Por ejemplo, en mangas acampanadas, escotes con volantes o faldas con aberturas, propios de esta tendencia.
Frescos, etéreos y con un aire desenfadado, encontrarás estos vestidos de novia sencillos para gorditas en telas livianas, como tul plumeti, encaje o gasa. Aunque un vestido de novia sirena completamente de encaje, como el de la foto, quedará muy bien a una novia que busca un estilo bohemio y ajustado.
Cortos o midi
Si prefieres corto, una buena opción (y muy chic) son los modelos tipo túnica que cortan levemente sobre las rodillas. Son 100 por ciento amplios y suelen ser de telas lisas, como crepe.
En cambio, si prefieres uno midi, podrás inclinarte por vestidos ceñidos (con falda tubo) u holgados (de línea A), que lleguen a media pantorrilla. Los midi son muy demandados como vestidos de novia civil para gorditas, especialmente en encaje y satén.
En colores
Si te gustan los colores vibrantes, otra opción es incorporarlos a través de los detalles. Elegir, por ejemplo, un vestido blanco con un fajín de seda negro, con un lazo verde de terciopelo o con una falda en degradé que transite a morado.
Ya sea totalmente o en detalles, los vestidos de novia de colores se imponen cada vez con más fuerza en los nuevos catálogos.